A pesar de convertirse rápidamente en una de las películas con más recaudación del año pasado, la última entrega de la saga Star Wars no logra colocarse entre las predilectas del público en China.
Mientras el sitio web Deadline reporta que en todo el mundo registra hasta la última semana una recaudación de 914 millones de dólares, durante su primer semana en los cines del país asiático el filme producido por Disney apenas alcanzó los 31 millones.
Esto puede resultar difícil de comprender, dado que la empresa estadounidense ha enfocado buena parte de sus últimas producciones hacia ese mercado. Filmes exitosos en las salas de cine del mundo, como Iron Man 3 o Pacific Rim ya han utilizado locaciones de ese país para filmar.
Ambas lograron colarse al top ten de las películas más vistas en China, con ganancias aproximadas de 111 y 100 millones de dólares, de acuerdo con datos de la página Statista.
La inclusión de la estrellas del cine local Donnie Jen y Jiang Wen entre el reparto, que también incluye al mexicano Diego Luna, pudo tener razón en la estrategia seguida por ambos filmes.
El caso de Transformers: la era de la extinción, es otro que se valió de esta idea. Pese a las críticas recibidas por la prensa especializada, el filme protagonizado por Mark Wahlberg generó ganancias por más de mil millones de dólares en todo el mundo. De ellos, China aportó más de 200 millones de dólares tan sólo en el fin de semana de su estreno en ese país.
Eso pudo deberse a que película hace referencia a ciertos aspectos de la cultura china muy específicos. Los protagonistas comen pato pekinés, y también consumen leche Yili Shuhua, una de las marcas más vendidas en el gigante asiático.
El interés de Hollywood en el mercado chino se explica al conocer que se trata del segundo mercado cinematográfico más grande del mundo. En 2015 logró reunir 6 mil 200 millones de dólares a nivel local, según el diario El País, y el rápido crecimiento de la industria en el gigante asiático ya augura la inclusión de más temáticas pensadas para ese mercado.
Asimismo, empresas chinas han financiado ya películas producidas por estudios norteamericanos, tales como Misión, Imposible. O bien, en el caso del operador de cines Dalian Wanda, quien el año pasado invirtió en la productora Legendary Pictures.
Se trata, después de todo, de un país que cuenta con más de mil 300 millones de habitantes, lo cual lo convierte en un lugar de interés para esa industria dado su enorme alcance. Sin embargo, está claro que Star Wars está lejos de consolidar su marca en el mercado chino.