El nacimiento de cada vez más agencias y empresas enfocadas a la comunicación comercial implica el reto de incrementar la inversión así como la demanda de servicios para hacer crecer al mercado y no caer en un círculo vicioso de rotación de clientes entre los mismos jugadores de la industria. Conseguir la integración de pequeños y medianos anunciantes es una de las grandes ambiciones de la industria publicitaria, ya que con la adición de las PyMes las oportunidades de crecer serán mayores dado el peso que este tipo de empresas tienen en la economía del país.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México existen 4 millones 15 mil unidades empresariales, de las cuales el 99.8 por ciento corresponden a compañías pequeñas y medianas, mismas que generan el 52 por ciento del Producto Interno (PIB) del país así como el 72 por ciento del empleo en la nación.

Agencias independientes y negocios locales
Aunque empresas pertenecientes a grandes grupos publicitarios ya apuestan por crear áreas especializadas que atiendan las necesidades de este sector, gracias a la flexibilidad en los modelos de trabajo y remuneración así como por el trato al cliente aún más cercano que implican, las agencias independientes son una pieza clave en la obtención de este objetivo.
Cifras del Departamento de Investigación de Merca2.0, indican que en México el 84.7 por ciento de las agencias de publicidad son empresas independientes, en donde el 87 por ciento de sus lientes son nacionales o locales.
A pesar de que muchas de estas agencias trabajan con anunciantes de talla internacional, es cierto que se presentan como una opción más accesible para desarrollar estrategias creativas como consecuencia de sus estructuras que si bien son más simples, resultan más cercanas e igual de efectivas para los pequeños anunciantes.
En palabras de Miguel Ángel Ruiz, socio director de Bombay, “sin duda hay un segmento muy interesante de empresas medianas que están buscando crecer su negocio a través de estrategias de marca mucho más integradas y que, en definitiva, no se sienten consideradas por las grandes redes; creen que si se llegan a acercar a ellas, serán la última de las prioridades”.