Moscú, Rusia.- Desde 1991 hasta 2013 el parque automotor de la capital rusa creció de 540.000 vehículos a 4,7 millones lo que permite visualizar la falta de espacios para aparcar, especialmente en el centro de la ciudad. Y a esto se le suma el que los rusos han desarrollado un gusto por los coches grandes, para mostrar el poder adquisitivo recién adquirido. Por ello Smart acaba de desarrollar una inusual prueba de conducción para aquellos conductores a los que la grúa les ha remolcado el coche, precisamente por estar mal aparcados en la congestionada metrópoli.
La idea ha sido de BBDO Russia para probar a los habitantes de Moscú que bajo estas condiciones, poseer un Smart es muy conveniente. Y para ello durante los fines de semana, días en los que suelen realizar las compras los moscovitas, se han dedicado a prestarle un Smart a aquellos conductores que han vehículo ha sido llevado al depósito por infringir los reglamentos de vialidad, “obligándoles”, muy convenientemente a realizar una prueba del producto, en vez de tener que usar un taxi.
La acción, documentada en este video, ha sido un éxito si se considera que se 623 conductores con coches remolcados realizaron el uso del Smart y pudieron comprobar su practicidad en las congestionadas calles de Moscú y las ventas aumentaron un 300 por ciento durante las dos semanas siguientes.