General Motors está de fiesta. La mayor fabricante de automóviles de Estados Unidos, dio a conocer que obtuvo ganancias récord durante 2015, gracias a una mayor venta de camionetas y camiones en América del Norte, impulsadas por el abaratamiento de la gasolina en el país vecino.
GM obtuvo 2 mil 800 millones de dólares entre octubre y diciembre de 2015 y utilidades anuales nunca antes vistas de 9 mil 700 millones de dólares. Para sus accionistas, la automotriz repartirá dividendos por 16 mil millones de dólares.
El caprichoso comportamiento de la economía ha dado un regalo invaluable a General Motors, una compañía que entre 2013 y 2014 tuvo que retirar del mercado 30.4 millones de automóviles debido a un defecto de fabricación en el dispositivo de encendido que ha sido relacionado con la muerte de por lo menos 51 personas.
Pero GM no es la única automotriz estadounidense que está descorchando el champagne. Su mayor competidora en aquél país, Ford, también anunció la semana pasada niveles récord en ganancias, de nuevo, gracias al abaratamiento de los combustibles, que propició una mayor venta de camionetas y vehículos pesados. Otro regalo del destino para la fabricante que estuvo al borde de la quiebra durante la crisis financiera de 2009.
De acuerdo con cifras de GoodCarBadCar.net, recopiladas por Statista, General Motors tiene en Estados Unidos una participación de mercado del 17.8 por ciento; le sigue Ford con un 14.9 por ciento; Toyota, con el 14.9; Fiat Chrysler con el 12.6; Honda con 9.3; Nissan el 8.4; Hyundai-Kia el 7.9 y Volkswagen tiene el 3.6 por ciento.
