Internacional.- Estudios han revelado que trabajar en publicidad es una de las profesiones en las que las personas son más propensas a ser alcohólicos y uno de los personajes de televisión favoritos de los publicistas, Don Draper, de la serie Mad Men no es la excepción. Lo irónico y preocupante es que el actor que lo interpreta, Jon Hamm, tuvo que internarse para superar su problema con la bebida.
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Un estudio del National Institute for Occupational Safety and Health de Estados Unidos, publicado en 2011, señaló que entre las profesiones cuyos practicantes son más propensos a ser alcohólicos los publicistas están en la posición 16, detrás de los cantineros, pintores, cocineros, marineros y músicos.
La relación entre alcoholismo y publicista no es nueva, incluso es parte de la temática de la serie de televisión Mad Men, que se transmite en Estados Unidos por la cadena AMC. La historia muestra la vida de Don Draper, un creativo publicitario bebedor y mujeriego que destaca en la industria en la década de los sesenta en la avenida Madison de Nueva York.
Draper es interpretado por el actor Jon Hamm, quien este miércoles dio a conocer a través de un vocero que justo acaba de completar un tratamiento de treinta días en una clínica para combatir su problema con el consumo de alcohol. Irónicamente el personaje que interpreta en Mad Men también es alcohólico.
El anuncio del tratamiento de Hamm también está funcionando como campaña de marketing de Mad Men, cuyos capítulos finales comenzarán a transmitirse el domingo 5 de abril.
