El éxito de las PyMEs no depende de grandes inversiones, de casualidades o de ganas, sino de implementar las estrategias correctas que las lleven al éxito. Estas tres estrategias deberían ponerse en marcha en las pequeñas y medianas empresas…

Líder

El producto o servicio debe ofrecer un plus, una vez definido el mercado se debe establecer una diferencia clara con la competencia, como desempeño, confiabilidad, calidad, diseño, servicio, entre otras. Obviamente obtendrás la respuesta correcta si previamente haces un estudio preciso de las necesidades y preferencias de los clientes actuales y potenciales. Apple es el ejemplo más claro de una compañía que implementa este tipo de estrategias y cuyos productos han hecho historia con sólo buscar ser diferentes para sus clientes.

Publicidad

El capital de las PyMEs es limitado y generalmente la publicidad no es una prioridad, sobre todo si se trata de medios costosos como la televisión o la radio, en los que los espacios publicitarios rebasan el presupuesto. Sin embargo, hay una opción tan efectiva como dichos medios, pero con una inversión mucho menor; se trata de Internet.

Un aspecto importante es crear una página web destacada, con un diseño atractivo y profesional, y luego promocionarla, sobre todo en redes sociales como Facebook, Twitter… La mejor publicidad es un contenido constante e interesante relacionado con el producto o servicio, a la par de una campaña adecuada.

Costos

La empresa debe ser líder en costos, no se debe confundir con precios. La compañía deberá enfocarse en el volumen de compra, es decir vender mucho y tener dominio en las plazas en que operan, para tener una participación de mercado más grande que los competidores, pero es necesario que los productos sean fáciles de elaborar. No es apta para quienes se dirigen a nichos. Ejemplos de empresas que crecieron con esa estrategia son Black & Decker, Du Pont y Wal-Mart.

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